Anthony Kiedis de los Red Hot Chili Peppers vivió una situación desagradable y surrealista cuando intentaba entrar en el hotel en el que también se alojaban los rolling Stone, la seguridad de los Stone lo confundió con un fan y hubo un pequeño forcejeo con el cantante.
Tras el desagradable malentendido, los guarda espaldas se disculparon y Kiedis pudo acceder al hotel. Lo curioso es que tanto el hotel como los Rolling Stone niegan que los guarda espaldas trabajen para ellos…